Qué ganicas!!!

Esas fueron las palabras exaxtas de Hector cuando finalmente quedamos para pasar el día en Rocopolis. Tras descansar de escalar durante una semana por diversos temas, había ganas de probar de nuevo en ese enorme rocodromo.

A los mencionados liantes se nos unían Leire y Ander. Hechas las presentaciones y ataviados con los trastos necesarios nos pusimos manos a la obra.

Calentamos en vías de 4º grado "con zapatillas" a petición de Hector. Tras hacernos 3 ya estabamos en disposición de hacer algo más apretado y nos buscamos una vía libre. Si si, el roco estaba a reventar y no había mucho donde elegir, aunque sin agiobios, con tiempo y esperando un poco hicimos todo lo que quisimos; bueno, todo lo que nuestros cuerpecillos aguantaron.

Hicimos un total de más de 10 vías por encima del 5C. La verdad es que el grado en algunas me parece que va olgado y en otras muy apretado (un 5C+? que probe me hizo petar). Y es que o lo artificial se me da mejor o...en otros rocos el grado esta mucho más duro (en el de tolosa por ejemplo).

El punto de inflexión de mi jornada llegó al animarme a probar un 6b tras haber sacado un 6a sin mucho problema. Lo saqué, dandole ese plus (+) de más al intinerario al saltarme una presa, por no verla o no mirar bien, y hacer un cambio de manos en una regleta a un dedo por mano jajajjaa.

Escalamos todo el día y todos anduvimos a gusto: Ander que re-debutaba nos demostro lo importante de la técnica, Leire dió un paso de gigante y sacó un 5C siendo ovacionada desde el pie de vía por nosotros y otras escaladoras (que por cierto, abundaban), yo me lo pasé teta y he cargado pilas para seguir entrenando y Hector más de lo mismo.

Todo esto acompañado de muy buen rollo y disfrutando de una rica comida preparada por Hector.

Terminamos la jornada haciendo la vía facil del característico Arco: un 6b por buenas presas pero con mucho desplome. Aqui os dejo una foto, y ya hay más en la sección de fotos: